top of page

DIME HONESTAMENTE, ME AMARAS DE LA MISMA MANERA?

Updated: Jul 12, 2022

Ha sido casi un año desde que escribí algo. Y ha pasado tanto tiempo, no porque no haya intentado mil veces escribir y postear acerca de mil y un temas acerca de salud mental, sino porque cada vez que empezaba quedaba atascada en la mitad y sentía que lo que estaba escribiendo era más una obligación que una manera de ayudar a entender el tema y las personas que pueden estar pasando por dificultades en el.


Hace ya algún tiempo un gran amigo me dijo que el blog me servía como manera de procesar cosas que habían pasando y estaban pasando, y siendo sincera, en el momento me dio mucha rabia porque sentí que estaba demeritando mi esfuerzo y lo que escribía, pero hoy entiendo que seguramente sí, así es, y eso no le quita valor al hecho de que esta manera de procesar pueda ayudar a personas que han pasado, están pasando, pasarán o conocen a alguien que pasa por lo mismo.


En este último año muchas cosas han cambiado, empezando por mi, yo he cambiado muchísimo: he mejorado en muchas áreas, he crecido y me he conocido en nuevos aspectos de la vida. Muchas cosas que pensé que serían para siempre terminaron, cosas que pensé que no iban a durar siguen creciendo y fortaleciéndose, amistades se fueron, otras llegaron y otras volvieron y en medio de todo esto he aprendido que definitivamente los caminos de Dios son completamente diferentes a los nuestros.


Qué tiene todo esto que ver con salud mental se preguntarán, pues todo. En medio de todos los cambios vividos he podido ver más que nunca cómo Dios me ha sanado de mi ansiedad, puesto que a pesar que ha sido un año loco, con altibajos, risas y mucho, mucho llanto, no me acuerdo cuando fue la ultima vez que tuve un ataque de ansiedad severo. Eso no quiere decir que no haya habido momentos en los que haya querido suceder, quiere decir que a pesar de eso ya no es como antes, y eso es gracias a que Dios ha puesto a mi alrededor personas que me han ayudado tremendamente, aún sin que ellas se den cuenta. Porque como siempre he dicho, Dios trabaja por medio de personas, nosotros somos sus pies y manos aquí en la tierra.


Quiero contarles un poco de cómo lo han hecho, ya que aunque para todas las personas la ayuda se ve un poco diferente, si hay principios universales. Creo que lo más importante, por lo menos para mí, ha sido que esas personas, de alguna manera u otra, me han dejado ser 100% yo, con mis altos y bajos, con todas mis maravillosas cualidades, pero también con mis defectos y momentos más oscuros y han seguido ahí, queriéndome, amándome, abrazándome y diciéndome que no estoy sola, que están ahí y no se van a ir a ningún lado sin importar qué, qué vale la pena pelearla juntos porque yo lo valgo. En otras palabras, me han demostrado el amor incondicional de Dios, ese amor que ama aún cuando no es correspondido, ese amor que le importa más nuestro corazón que cualquier otra cosa y ese que echa fuera todo temor (1 Juan 4.18).


Y es que es eso, la ansiedad no es más que un temor irracional a un evento futuro inexistente, por lo tanto cuando tenemos personas alrededor que nos demuestran ese amor incondicional, ese temor se disipa y poco a poco va desapareciendo. Yo entiendo que no es fácil, no es fácil a veces estar ahí cuando las personas están pasando por momentos difíciles, porque no son ni las más racionales, ni las más amorosas, ni las mas amenas, y muchas veces es muy difícil ver a las personas que queremos mal, pero es ahí, cuando somos menos amables cuando más le necesitamos y cuando ese amor nos va a ayudar a seguir mejorando. En una prédica Dante Gebel dijo algo que se me quedo marcado, "ser completamente conocido y amado es el regalo más sanador que un ser humano le puede dar a otro"


Por otro lado, es importante que entiendan que muchas veces nosotros no sabemos, ni siquiera, en el momento cómo nos pueden ayudar, aunque si apreciamos mucho que nos pregunten, y eso es porque en ese momento no estamos pensando tan racionalmente, así que un simple abrazo y estar ahí estando (valga la redundancia) muchas veces es más que suficiente, ya que cuando eso sucede vamos a estar más dispuestos a abrir nuestro corazón cuando ya podemos pensar más racionalmente, porque sabemos que nuestro corazón está seguro con ustedes. Yo personalmente tiendo a huir y huyo porque me da miedo que si me ven así me dejen de querer, y en estos días alguien me preguntó si es mejor dejarme huir, a lo que en el momento le respondí que en ese momento la verdad no sabía; pero después de pensarlo y analizarme (a veces quisiera poder apagar mi cabeza) entendí que no quiero que me dejen huir, porque huir es una respuesta al miedo, a ideas erróneas que he creado en mi cabeza, como por el ejemplo que tengo que ser perfecta para que me quieran y para merecer amor. Por lo tanto al no dejarme huir me han ayudado a romper y deshacer creencias erróneas. Quiero aclara que yo se que no es así, pero en momentos de ansiedad son ese tipo de pensamientos de los que es difícil deshacerse.


Y puedo darles muchísimos más ejemplos de lo que mis circulo íntimo y cercano ha hecho para ayudarme, a sabiendas así como sin saber, como por ejemplo hacerme reír en ese momento, ayudar a quitar mi foco de esos pensamientos tóxicos y enfocarlos en otros, orar en ese momento conmigo y por mí (este a mí personalmente me ayuda muchísimo), etc., pero creo que todo se resume en lo siguiente: Amar


"Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos." - Juan 15.12-13


El amor partió la historia de la humanidad en dos y aunque estoy completamente segura que en su momento no fue placentero para Jesús su sacrificio, lo hizo porque sabía el resultado que iba a tener. De la misma manera, muchas veces no es placentero estar ahí para las personas que están pasando momentos difíciles por mil y una razones: porque no sabemos cómo, porque nos mueve cosas que no sabíamos que teníamos adentro, porque no entendemos el por qué están así, especialmente si creen en Dios y tienen fe, porque tenemos la creencia errónea que el ser cristiano significa estar exentos de problemas, pero bueno eso es otro tema, y bueno muchas razones más. Pero a pesar de eso, nuestro amor puede partir la historia de vida de una persona en dos, pero para eso no debemos olvidar que el amor cubre multitud de fallas (1 Pedro 4.8), y que por sobre todo:


"El que ama tiene paciencia en todo, y siempre es amable.


El que ama no es envidioso, ni se cree más que nadie.


No es orgulloso.


No es grosero ni egoísta.


No se enoja por cualquier cosa.


No se pasa la vida recordando lo malo que otros le han hecho.


No aplaude a los malvados, sino a los que hablan con la verdad.


El que ama es capaz de aguantarlo todo, de creerlo todo, de esperarlo todo, de soportarlo todo."

- 1 Corintios 13: 4-7


Y sí, no es fácil, pero no entiendo de donde hemos creído que las cosas que valen la pena son fáciles, que si no es fácil y no nos da felicidad instantánea entonces no lo es. El amor es una decisión, amar a las personas es una decisión y el amor es trabajo, esfuerzo, comunicación, así que para poder demostrar amor a aquellas personas que pasamos por momentos difíciles en nuestra salud mental, debemos dejar de lado es pensamiento facilista, porque ayudarlas no va a ser fácil, pero al final del camino va a valer la pena.


Comments


Subscribe Form

Thanks for submitting!

  • Facebook
  • Instagram

©2020 by Heart & Soul. Proudly created with Wix.com

bottom of page